miércoles, 25 de junio de 2014

Dios

Si tu dìa no
fue como esperabas
deja todo en las
manos de Dios
mañana todo sera mejor


jueves, 19 de junio de 2014

DONDE ESTAN LAS MANOS DE DIOS


Cuando observo el campo sin arar, cuando los aperos de labranza están olvidados, cuando la tierra
esta quebrada y abandonada. Cuando miro tantos niños abandonados, tantos hermanos que lloran , tantas guerras.
Cuando miro las lagrimas , la baja estima , la tristeza , los odios , el inconformismo ....... me
pregunto: ¿Dónde están las manos de Dios?
Cuando observo la injusticia, la corrupción, el que explota al débil. Cuando veo al prepotente y pedante,
enriquecerse del ignorante y del pobre, del obrero y del campesino carente de recursos para defender sus derechos,
me pregunto: ¿Dónde están las manos de Dios?

Cuando contemplo a esa anciana olvidada, cuando su mirada es nostálgica y balbucea aún palabras de amor
por el hijo que la abandonó, me pregunto: ¿Dónde están las manos de Dios?

Cuando miro a ese joven, antes fuerte y decidido, ahora embrutecido por la droga y el alcohol. Cuando
veo titubeante lo que antes era una inteligencia brillante y ahora con harapos, sin rumbo, sin destino; me pregunto:
¿Dónde están las manos de Dios?


Cuando esa chiquilla que debería soñar en fantasías, la veo arrastrar la existencia y en su rostro se refleja ya
el hastío de vivir, y buscando sobrevivir se pinta la boca y se ciñe el vestido y sale a vender su cuerpo; me pregunto:
¿Dónde están las manos de Dios?
Cuando aquél pequeño a las tres de la madrugada me ofrece su periódico o su miserable cajita de dulces sin
vender. Cuando lo veo dormir en la puerta de un zaguán o debajo de algún puente titiritando de frío, con unos
cuantos periódicos que cubren sufrágil cuerpecito. Cuando su mirada me reclama una caricia, cuando
lo veo sin esperanza vagar con la única compañía de un perro callejero, me pregunto: ¿Dónde están las manos de Dios?

Y me enfrento a él y le pregunto: ¿Dónde están tus manos Señor?, para luchar por la justicia, para dar
una caricia, un consuelo al abandonado, rescatar a la juventud de las drogas, dar amor y ternura a los olvidados.

Después de un largo silencio, escuché su voz que me reclamó: ¿No te has dado cuenta que TÚ eres mis manos?.
¡Atrévete a usarlas para lo que fueron hechas, para dar amor y alcanzar las estrellas!


Y entonces comprendí que las manos de Dios somos TÚ y YO. Nosotros somos los que tenemos la voluntad,
el conocimiento y el coraje para luchar por un mundo más humano y más justo, aquellos cuyos ideales sean más altos
que no puedan acudir a la llamada del destino, aquellos que desafiando el dolor, la crítica, la blasfemia,
se reten a sí mismos para ser las manos de Dios.
Señor, ahora me doy cuenta que mis manos están sin llenar, que no han dado lo que deberían dar. Te pido
perdón por el amor que me diste y que no he sabido compartir. Sé que las debo usar para amar y conquistar la grandeza
de la creación. El mundo necesita esas manos llenas de ideales y estrellas, cuya obra magna sea contribuir día a día a forjar
una civilización. Unas manos que busquen valores superiores, que compartan generosamente lo que Dios nos ha dado
y puedan al final llegar vacías al cielo porque entregaron todo el amor para el que fueron creadas...

Y entonces Dios seguramente dirá: ESTAS, ¡SON MIS MANOS!

Palabrita de Dios para ti

Dios me hizo fructificar en la tierra de
mi afliccion
Genesis 41:52

martes, 17 de junio de 2014

UN MILLON DE SAPOS

Muchos se angustian por problemas que, en su mayoría, nunca llegan a hacerse realidad.  Sufren con anticipación, pensando e imaginando cosas que pudieran suceder.  La mayoría de nuestras preocupaciones se deben a la falta de confianza en Dios.

Un hacendado fue a la ciudad y le preguntó al dueño de un restaurante si podía utilizar un millón de piernas de sapos.  El dueño del restaurante quedó asustado y quiso saber dónde pretendía el hacendado conseguir tantas piernas de sapos.  El hacendado le respondió: Cerca de mi casa hay un pequeño lago que está invadido e infestado de esos bichos.  Son millares y hacen un barullo infernal, croando toda la noche.  ¡Me estoy volviendo loco!

Quedó decidido, entonces, que el hombre le traería quinientos sapos por semana, durante algún tiempo.  En la primera semana, el hacendado volvió al restaurante un poco avergonzado, pues traía en sus manos dos sapos.  El comerciante le preguntó: ¿Dónde está mi pedido?

El hombre respondió:  Yo estaba totalmente engañado.  ¡Había solo estos dos pequeños sapos en el lago!  Ellos solos son los que hacían todo el barullo.

La próxima vez que alguien te critique o se ría de ti, acuérdate de que no son miles de sapos los que hacen todo el barullo, sino apenas dos sapitos.  Mientras dos critican y ríen, cientos te apoyan y animan.

Acuérdate de que las angustias y los problemas parecen mayores en la oscuridad.  Hay una posibilidad muy grande de que, cuando llegue mañana y lo pienses mejor, el problema habrá disminuido su importancia o habrá desaparecido, quedando en su lugar un asunto de fácil solución.

Lo mejor es dejar las preocupaciones en las manos de Dios.  Ten hoy un día feliz, sabiendo que Dios está en el control de tu vida.

Pero yo le cantaré a tu poder, y por la mañana alabaré tu amor: porque tú eres mi protector.

Salmo 59:16

domingo, 15 de junio de 2014

Dios te bendiga

Que Dios bendiga este mes tu hogar y lo llene de paz y amor.

Porque yo derramare aguas
sobre el sequedal, y rios sobre la
tierra arida; Mi espiritu derramare sobre tu generacion,
y mi bendicion sobre tus renuevos.
Isaias 44:3